Concurso Rovartal - Semana 8

Rosuvastatina en pacientes diabéticos

Las estatinas disminuyen los niveles de LDLc y de proteína C reactiva, efectos que se asocian con un efecto cardiovascular beneficioso.

Autor/a: Dres. Betteridge DJ, Gibson JM y Sager PT

Fuente: American Journal of Cardiology 100(8):1245-1248, Oct 2007

Introducción

Las recomendaciones actuales estipulan que en los pacientes con diabetes mellitus tipo 2 (DBT2), el colesterol asociado a lipoproteínas de baja densidad (LDLc) debe ser menor de 100 mg/dl. Sin embargo, los niveles menores de 70 mg/dl podrían beneficiar aún más a estos pacientes. Además, los beneficios de las estatinas podrían corresponderse con otros efectos de estos fármacos, como por ejemplo sus propiedades antiinflamatorias.

Asimismo, las estatinas han demostrado reducir la proteína C reactiva (PCR), un marcador inflamatorio de alto valor pronóstico en la enfermedad coronaria. Se ha encontrado que en los pacientes con DBT2, los niveles de LDLc menores de 70 mg/dl y los de PCR menores de 2 mg/l se relacionan con una tasa menor de eventos cardiovasculares, luego de un infarto de miocardio.

En este estudio los autores buscaron determinar la eficacia de la rosuvastatina en comparación con la atorvastatina en la disminución del  LDLc a menos de 70 mg/dl y la PCR a menos de 2 mg/l, en pacientes con DBT2.

Métodos

Esta investigación es un subanálisis del estudio ANDROMEDA, el cual comparó los efectos de la rosuvastatina (10 a 20 mg/día) contra la atorvastatina (10 a 20 mg/día) en pacientes con DBT2. Se excluyeron los pacientes con diabetes no controlada, con antecedentes de enfermedad cardiovascular o con hipercolesterolemia familiar. A aquellos individuos que se encontraban en tratamiento con hipolipemiantes se les indicó suspenderlos por 4 semanas. Luego se inició el tratamiento con rosuvastatina o con atorvastatina (10 mg/día). A las 8 semanas, la dosis se incrementó a 20 mg/día para las 2 drogas, durante  8 semanas más.

El criterio de valoración principal fue el cambio de los niveles de LDLc luego de 16 semanas de tratamiento. Los criterios de valoración secundarios incluyeron a los niveles de LDLc a las 8 semanas y los valores de otros componentes del perfil lipídico. Se realizaron análisis post hoc para determinar los niveles de PCR y los efectos de las 2 estatinas en ellos.

Resultados

Se incluyeron 248 pacientes en el grupo rosuvastatina y 246 en el grupo atorvastatina. No hubo diferencias en las características basales de la población. A las 16 semanas de tratamiento, se observó una disminución significativa en los niveles de PCR con ambas estatinas (-40% para rosuvastatina, -34% para atorvastatina, p = 0.139).

Cuando se compararon los efectos de las estatinas sólo en los pacientes con valores elevados de PCR (≥ 2 mg/l), ambas redujeron significativamente los niveles (-55% para rosuvastatina contra -43% para atorvastatina). Sin embargo, en este grupo de pacientes de alto riesgo, la rosuvastatina fue más eficaz que la atorvastatina en reducir los niveles de PCR a las 8 semanas de tratamiento (-44% contra -32%, respectivamente).

Los niveles de LDLc se redujeron en mayor medida con rosuvastatina que con atorvastatina luego de 16 semanas de tratamiento (-57% contra -46%, respectivamente, p < 0.001). Además, la rosuvastatina disminuyó en mayor medida que la atorvastatina los niveles de colesterol total, de colesterol no asociado a lipoproteínas de alta densidad y de apolipoproteína B.

Se analizó el número de pacientes que alcanzaron el doble objetivo de colesterol menor de 70 mg/dl y de PCR menor de 2 mg/l. A las 16 semanas, 44% de los pacientes tratados con 10 mg/día de rosuvastatina alcanzaron este objetivo, mientras que sólo el 23% de los sujetos que recibieron atorvastatina lo hicieron (p < 0.001). Estos porcentajes se incrementaron cuando los pacientes recibieron 20 mg de rosuvastatina o de atorvastatina (58% contra 37%, respectivamente, p < 0.001).

Discusión

Según señalan los autores, este estudio mostró que la utilización de la rosuvastatina o de la atorvastatina disminuye significativamente la PCR en pacientes con DBT2. Este hallazgo es importante ya que se ha demostrado que la disminución de la PCR es tan importante como la reducción del LDLc.

En el estudio PROVE IT-TIMI 22 se demostró que aquellos pacientes que alcanzaron el doble objetivo de un LDLc menor de 70 mg/dl y una PCR menor de 2 mg/l presentaron menor tasa de eventos coronarios recurrentes (2.4 contra 3.1 eventos/100 pacientes/año).

Un análisis post hoc de esta investigación demostró que aquellos pacientes que disminuían los niveles de PCR presentaban una mayor supervivencia.

En el estudio A to Z se halló  que los pacientes con PCR mayor de 3 mg/l tenían una mortalidad 3 veces mayor luego de un síndrome coronario agudo que los pacientes con PCR menor a 1 mg/l. Los autores señalan que se necesitan más estudios para clarificar el papel de la PCR en los eventos cardiovasculares, y determinar la importancia de las estatinas en prevenir estos eventos por medio de la reducción de los niveles de PCR.