Resultados negativos

Antioxidantes en degeneración macular

Consumir suplementos antioxidantes además vitamina C, vitamina E y betacaroteno no protegería de la degeneración macular.

Por Genevra Pittman
 
NUEVA YORK (Reuters Health) - Consumir suplementos antioxidantes además vitamina C, vitamina E y betacaroteno no protegería de la degeneración macular en los adultos mayores.
 
Un equipo halló que la combinación de luteína y zeaxantina sólo ofrecía protección adicional en las personas que empezaban a ingerir las dosis más bajas de esos nutrientes a través de la dieta (por ejemplo, de las verduras de hojas verdes).
 
"Todos esperaban que el efecto fuera mayor", dijo el doctor Jack Cioffi, jefe de oftalmología del Centro Médico de la Columbia University, en Nueva York, que no participó del estudio.
 
Aun así, agregó que quizás recomendaría que los pacientes con riesgo de degeneración macular consuman luteína y zeaxantina en lugar de betacaroteno, que en el nuevo estudio estuvo asociado con un aumento del riesgo de cáncer pulmonar en los fumadores.
 
La degeneración macular es una enfermedad ocular crónica que provoca visión borrosa y puntos ciegos cada vez más graves. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por su sigla en inglés) estiman que hay 1,8 millones de estadounidenses mayores de 40 años con degeneración macular asociada con la edad.
 
"Quisimos ver si podíamos mejorar nuestro trabajo con estos resultados, que fuera un poco más seguro", dijo la doctora Emily Chew, del Instituto Nacional de Ojos en Bethesda, Maryland, que dirigió el estudio.
 
Con su equipo agregó una combinación de luteína y zeaxantina o dos tipos de ácidos grasos omega-3 a los suplementos que utilizaban algunos de los 4.203 participantes originales del estudio. Tenían entre 50 y 85 años y no suspendieron las vitaminas y los minerales que estaban tomando.
 
En los cinco años siguientes, el 29-31 por ciento de los participantes tuvo un avance de la degeneración macular, independientemente de si habían utilizado o no los suplementos adicionales.
 
En otro análisis, la proporción de pacientes operados de cataratas por otros trastornos oculares fue similar en todos los grupos (alrededor del 24 por ciento).
 
El equipo observó que los participantes tenían un buen nivel educativo y tendían a alimentarse saludablemente antes de consumir los suplementos.
 
"Podría ser que sumar más antioxidantes, y distintos, no les proporcionara beneficios extras, lo que probablemente sea lo que ocurrió", opinó Cioffi.
 
Chew dijo estar convencida de que la luteína y la zeaxantina tienen un papel importante en la prevención de la pérdida visual.
 
En el estudio, publicado en Journal of the American Medical Association, el uso de esos antioxidantes estuvo asociado con un 26 por ciento menos riesgo de avance de la degeneración macular en los participantes que menos verduras de hojas verdes consumían.
 
"Quienes más se beneficiarán serán los que tengan riesgo de padecer degeneración macular", agregó.
 
El hallazgo sobre los pacientes con cataratas aparece publicado en JAMA Ophthalmology y todos los resultados se presentaron en la reunión anual de la Asociación para la Investigación de la Visión y la Oftalmología, en Seattle.
 
Para Cioffi, la posible relación entre el cáncer pulmonar y el consumo de betacaroteno es "algo confusa".
 
En el estudio, el 2 por ciento de los consumidores de betacaroteno desarrollaron el cáncer, comparado con el 1 por ciento de los que no lo consumían. La mayoría de los cánceres aparecieron en exfumadores.
 
La combinación de luteína y zeaxantina es de venta libre en Estados Unidos y cuesta entre 10 y 15 dólares por mes.
 
FUENTES: Journal of the American Medical Association y JAMA Ophthalmology, online