Obesidad

Obesidad central en adolescentes

La distribución de grasa corporal cambió en los últimos años, en adolescentes de ambos sexos.

Autor/a: Dres. McCarthy HD, Ellis SM, Cole TJ.

Fuente: BMJ. 2003 Mar 22;326(7390):624.

La prevalencia de sobrepeso y obesidad está aumentando en niños y adolescentes ingleses en los últimos 10 a 15 años, tomando como referencia el Índice de Masa Corporal (IMC). Sin embargo, el IMC no refleja la distribución de la grasa  y tanto en niños como en adultos, la adiposidad centralizada en el tronco se asocia con mayor riesgo de complicaciones metabólicas. La cantidad de tejido adiposo visceral en niños de 11 a 15 años, se relaciona con los niveles  plasmáticos de LDL-colesterol, triglicéridos e insulina basal.

El perímetro de la cintura es un parámetro muy sensible y específico de la grasa central en adultos jóvenes y puede ser útil para detectar qué chicos obesos tienen más riesgo de complicaciones metabólicas. Existen tablas de percentilos de perímetro de cintura para niños ingleses.

Se analizaron los datos de IMC y perímetro abdominal de sujetos de igual edad y sexo en estudios de corte transversal con 10-20 años de diferencia en Gran Bretaña, para analizar las tendencias de los cambios antropométricos desde ese momento hasta la actualidad.

Métodos:

Se tomaron en cuenta datos de peso, talla y perímetro de cintura, que se habían recopilados en estudios de corte transversal previamente. Las mediciones se hicieron para la industria de ropa, en varones de 6 a 16 años 1977 y en mujeres en 1987. Los participantes eran representativos de la población británica en cuanto a etnia, nivel socio-económico, residencia urbana o rural.

El segundo estudio considerado fue un seguimiento nutricional que se hizo en 1997 en sujetos de 4 a 18 años, de los cuales se tomó en cuenta sólo los mayores de 11 años.
En todos los estudios se midieron peso, talla, perímetro de la cintura (medido en el punto medio entre la 10º costilla y el borde superior de la cresta ilíaca).

Resultados:

Tomando como referencia la edad y el sexo, los valores de IMC y perímetro de cintura fueron mucho mayores en 1997 en todos los grupos, excepto en los varones de 13 años. El IMC aumentó 1,5 en varones y 1,6 en mujeres (desvío standard-DE-: 0,16). El aumento medio del perímetro de cintura fue 6,9 cm en los hombres (DE: 0,46)  y 6,2 cm en las mujeres (DE: 0,34), a lo largo de 10-20 años.

Es notorio el mayor aumento del perímetro abdominal en comparación con el IMC, y esta tendencia es más acentuada en mujeres. Si percentilamos los valores medios de las niñas el perímetro de cintura subió del perc 50 al 85, mientras que el IMC medio subió del perc 44 al 70. En general la prevalencia de obesidad aumentó en los últimos años.

Discusión:

Se analizaron 2 parámetros de adiposidad en 2 cortes transversales a lo largo del tiempo, el IMC y la circunferencia de la cintura. Se encontró que ambos índices aumentaron, reflejando una creciente prevalencia de obesidad infantil.

El aumento del perímetro abdominal no se debe sólo al aumento de la grasa visceral, también refleja la grasa subcutánea y la grasa corporal total. El IMC, en cambio, incluye a la masa grasa y la masa magra. El aumento del IMC no permite calcular qué compartimento está aumentado.

En adolescentes obesos la acumulación del exceso de grasa ocurre predominantemente en el tronco. Un estudio reciente, hecho en jóvenes españoles, muestra tendencias similares.
No es posible estimar el impacto de este aumento del perímetro abdominal sobre la morbilidad actual y futura. Un estudio hecho en USA muestra que los jóvenes que tienen perímetros de cinturas por encima del perc 90 tienen mayores concentraciones plasmáticas de LDL-colesterol, triglicéridos e insulina y niveles menores de HDL-col.

Los cortes transversales fueron hechos en los varones con 20 años de diferencia y en las mujeres con 10, y sin embargo las chicas mostraron cambios mayores. Según este estudio la ingesta calórica actual es menor, y se atribuye el aumento de la adiposidad al sedentarismo.

El perímetro de la cintura debe medirse en forma rutinaria en el examen físico de los niños y adolescentes, y es urgente implementar acciones que reviertan las tendencias actuales y disminuyan así, los costos físicos y psicológicos de la obesidad en niños y adolescentes.

Artículo comentado por la Dra. Débora Setton, editora responsable de  IntraMed en la especialidad de Nutrición.